El presidente de la Sociedad Nacional de Minería (SONAMI), Jorge Riesco, junto al vicepresidente Francisco Araya, realizó una visita a la Región de Valparaíso, específicamente a Petorca, para conocer la realidad de la minería en esas zonas y sus principales inquietudes. En la visita también participaron los directores de SONAMI, Eduardo Catalano y Carlos Alberto Castillo.

El vicepresidente de SONAMI, Francisco Araya, señaló que estas visitas a terreno forman parte fundamental de la gestión de la  mesa, “para conocer in situ las preocupaciones  de nuestros asociados y apoyarlos en su desarrollo  productivo”.

En el marco de la visita de la directiva de SONAMI a la región, el presidente y vicepresidente sostuvieron una reunión de trabajo con las asociaciones mineras de la Región de Valparaíso, ocasión en que los directivos hicieron mención a la necesidad de ampliar el umbral de producción de la pequeña minería.

De la misma forma, se conversó sobre la necesidad de  que SONAMI se incorpore a la Mesa de Trabajo que encabezan las autoridades  regionales, cuyo propósito es abordar y solucionar temas productivos de la pequeña minería. Asimismo, la necesidad de abrir otros poderes de compra de Enami vinculados a empresas locales, como El Bronce de Petorca, entre otras materias.

Como  parte de la visita, la directiva de SONAMI realizó un recorrido por la  planta de flotación de pequeña minería Hasparren, que recupera el 80% del agua que contiene el relave y que se relaciona con el uso eficiente del recurso hídrico.

Según explicaron los ejecutivos de Hasparren, la planta presenta un proceso de flotación tradicional con la diferencia de la etapa del depósito del relave. Lo normal es que los relaves se depositen en tanques o embalses. En el caso de Hasparren se decidieron por un sistema que extrae casi el 80% del agua de la pulpa generando así un relave que se podría denominar en pasta y que se depositan en forma de terrazas. “Los beneficios son que se recupera parte importante del recurso hídrico en una zona de gran escasez y también a nivel país. Por otra parte, el manejo del residuo es más seguro que el tradicional, porque está menos sujeto a deslizamientos, dado que se almacena en terrazas. La tecnología también permite, que la tramitación de los  proyectos de relaves solo se canalicen por Sernageomin, acortando los plazos de aprobación”, destacó Álvaro Cruz, gerente general de la planta.