Con la presencia de la ministra de Minería, Aurora Williams Baussa, el presidente de la Sociedad Nacional de Minería (SONAMI), Alberto Salas, y la viceministra Adjunta de Recursos Naturales de Canadá, Marian Campbell Jarvis, se realizó este lunes el seminario “Minería en América: Competitividad y Desafíos”, en el marco de la inauguración de Expomin 2014, la feria más importante de la región y la segunda más grande del mundo. El seminario es organizado por SONAMI y contó con la asistencia de los representantes de las cámaras y asociaciones mineras de Argentina, México, Perú, Colombia, Ecuador, Canadá y Chile.
Los paneles fueron moderados por los periodistas Roberto Sapag, director de Diario Financiero, y Nicolás Paut, editor de economía de CNN Chile.
En la ocasión, se analizaron los principales temas que atañen al sector minero como es el caso de las políticas relacionadas con la industria, inversiones, costos, materias regulatorias, energía, capital humano, agua y la relación con las comunidades.
En la ocasión, la ministra Aurora Williams dio su visión de las dificultades que atraviesan actualmente las principales economías mundiales como es el caso de Europa y Estados Unidos, como también al enfriamiento de la economía China, lo cual están dejando sentir sus consecuencias en la industria de toda la región.
La secretaria de Estado agregó que “la minería se ha transformado en una actividad fundamental para alimentar el desarrollo económico y especialmente el desarrollo social de muchos países de la región, aspectos que no debemos obviar y mucho menos olvidar”.
Aurora Williams precisó que el trabajo que hay seguir es la de desarrollar una minería sustentable y el de mantener un adecuado clima de negocios, estabilidad jurídica y una institucionalidad sólida para atraer las inversiones extranjeras a la región.
En su alocución, la titular de la cartera de Minería dijo que el anhelo es el desarrollar una industria competitiva y parte del trabajo del Gobierno es el de jugar un rol articulador para solucionar los desafíos que son costos sociales, energéticos y capital humano.
Aurora Williams dijo que la industria minera nacional ha ido perdiendo competitividad, porque existen elementos que están afectando la actividad y que se han transformado en desafíos como es el caso de los altos costos de la energía, la necesidad de mayor capital humano y la eficiencia en recursos hídricos, entre otros.
Ante estos desafíos, la ministra señaló que es necesario incorporar más innovación a las faenas mineras como también trabajar en conjunto con la comunidad, ya que estás demandan hacerse partícipes de los distintos proyectos, por lo que las empresas “no sólo deben considerar a las comunidades cercanas a sus yacimientos, sino que a toda la cadena logística del proyecto”.
En ese sentido, explicó que la necesidad que tiene actualmente la comunidad es la de conocer el proyecto y cuánto gana con ese desarrollo minero.
En tanto, el presidente de la Sociedad Nacional de Minería (SONAMI), Alberto Salas, resaltó la importancia que tiene la minería en la comunidad, afirmando que el sector es el que tiene la responsabilidad de “transmitirla a quienes nos ven lejanos y no ven que esto es una parte consustancial del ser humano. La minería y en Chile en particular está tan arraigada a nuestra nación y a nuestro pueblo como lo es la agricultura que sí tiene una raigambre mucho más sentido”.
Salas sostuvo que “nosotros con este seminario queremos en una manera acercar a la minería a la gente, mostrar que nos reconozcan los esfuerzos tremendos y los efectos de encadenamientos productivos tan valiosos para el mejor desarrollo del ser humano en todos los aspectos, no sólo en lo económico, sino que en lo social, cultural, ya que es parte de un tejido de actividades junto con todas las otras áreas productivos que conformamos la base del empleo y el desarrollo”.
Por su parte, la viceministra Adjunta de Recursos Naturales de Canadá destacó el hecho que Chile sea conocido en el mundo no solo por su belleza, la cultura de grandes escritores, sino que también por la fortaleza de los chilenos y la capacidad de levantarse ante catástrofes como el terremoto en el norte del país y el incendio que afectó a Valparaíso.